



Si bien es cierto la falta de conectividad de Puerto Williams es gravísima e histórica, de un tiempo a esta parte la comuna está viviendo un doble aislamiento, por una parte el asilamiento físico que implica el vivir a 300 kilómetros más al sur de Punta Arenas, y el otro no menos grave es el fallo constante y permanente de las comunicaciones por celular e internet.